Autotest

Acostada boca arriba sobre una superficie plana (ideal el piso), flexiona las rodillas apoyando bien los pies en el suelo. Coloca dos dedos justo por encima del ombligo y levanta la cabeza como queriendo hacer un abdominal. Repite lo mismo sobre el ombligo y por debajo de él. Si sientes que tus dedos se hunden en alguno de estos lugares, podría existir una diástasis. Mientras más dedos puedas meter, mayor es la separación. Ten en cuenta que hasta el sexto mes posparto, todavía tus órganos se siguen acomodando.